Los aceites vegetales puros constituyen una alternativa extraordinaria a la cosmética de cremas y lociones típica en nuestros días. De hecho, existen aceites para cada tipo de piel, en general todos son muy buenos para pieles delicadas, y también resultan mucho más baratos y generalmente bastante más eficaces que la mayoría de los cosméticos.
Los aceites de origen sintético, como el aceite mineral y vaselina, que se encuentran en la gran mayoría de los productos cosméticos, son molecularmente “muertos”. Esto significa que son incapaces de interactuar con las células de la piel. Sólo los aceites que son molecularmente “vivos”, extraídos de fuentes naturales, tienen el poder de trabajar con las células para estimular la producción de colágeno saludable.
Si su piel es blanda y flácida, es porque las células de la piel han perdido su capacidad natural para la fabricación de proteínas estructurales y ácidos grasos como el colágeno, elastina y ácido hialurónico. También porque moléculas dañinas llamadas radicales libres, han atacado y ha paralizado la función saludable de las células. Los radicales libres son causados por la acumulación de toxinas en el cuerpo y por la sobreexposición a la luz del sol.
Los aceites naturales son potentes fuentes de proteínas, vitaminas ácidos grasos esenciales, minerales y enzimas, que tienen el poder de nutrir a las células lisiadas y traerlas de vuelta a la salud. Los nutrientes que poseen proporcionan una hidratación saludable, aumentan la actividad antioxidante, estimulan la producción de colágeno y elastina, y promueven el crecimiento de nuevas células. Como resultado, se experimenta un aumento significativo en la firmeza y salud de la piel.
Como norma general hay que tener en cuenta que los aceites sean puros, es decir el aceite extraído de la planta y nada más. También es importante que se conserven en un frasco oscuro y que se mantengan alejados de fuentes directas de frío o calor.
¿QUÉ SON LOS ACEITES VEGETALES?
Son sustancias extraídas de los frutos oleaginosos de algunas plantas. Son ricos en vitaminas, minerales y ácidos grasos poliinsaturados que suponen un extraordinario aporte de nutrientes en la piel. La proporción de estos ácidos grados y sus diferentes características, son las que confieren las diferentes propiedades de cada aceite. Generalmente se extraen de frutos, pero también de semillas.
Los aceites vegetales han sido utilizados a lo largo de la historia de la humanidad, no solo por su aporte nutricional en la dieta, sino también, por sus propiedades cosméticas para mantener la piel en buen estado y prevenir el envejecimiento prematuro, gracias a sus cualidades excepcionales para hidratar, nutrir y regenerar la piel.
Las ventajas de utilizar los aceites vegetales como productos de hidratación y nutrición son muchas y no hace falta mucho tiempo para observar resultados evidentes. Se trata de sustancias ricas en nutrientes imprescindibles para la piel y la regeneración celular.
¿CÓMO SON LOS ACEITES VEGETALES?
En su estado habitual, son líquidos a temperatura ambiente, pero algunos como el de coco son tan saturados que se solidifican.
Sus propiedades son óptimas cuando son obtenidos por primera presión en frío. Así conservan la vitamina E, betacorenos, etc.
¿CÓMO USARLOS?
Los aceites vegetales se pueden utilizar exactamente igual que utilizamos nuestra crema diaria, es decir, aplicándolos directamente sobre la piel. El único inconveniente al utilizar aceites vegetales como producto de cosmética es la falta de costumbre, nada más. Si acostumbramos a utilizar cremas industriales que tienen cierta textura y cierto olor, puede resultar extraño aplicar sobre la piel un aceite que normalmente no huele a nada o, como mucho, huele ligeramente al fruto de la planta. Hay personas que dicen sentirse molestas con su textura untuosa en la piel, sin embargo, casi todos los aceites se absorben con rapidez y esa sensación extraña tiene más que ver con esa falta de costumbre que con una incomodidad real.
Los aceites vegetales se pueden usar solos, aunque lo ideal es combinarlos con otros aceites vegetales indicados en cosmética natural y con aceites esenciales para reforzar sus propiedades terapéuticas. Es necesario saber que los aceites esenciales generalmente no se deben aplicar directamente sobre la piel, sino diluidos en aceites vegetales en una proporción del 1 al 5%, dependiendo del aceite esencial y del propósito de la mezcla.