Aceite de babchi

Origen del bakuchiol, el retinol vegetal y sin efectos secundarios.

La planta de Babchi, Psoralea corylifolia pertenece a la familia Fabaceae y crece en el Sur de Asia, fundamentalmente en la India. Sus semillas se utilizan para extraer aceites por presión en frío. Se utiliza tradicionalmente como vasodilatador, pigmentador y tónico cardíaco en Ayurveda desde hace más de 4000 años. Ayuda a tratar diversas afecciones de salud como lepra, leucoderma, vitiligo, estrés y dolencias reproductivas.

Las semillas de esta planta están consitutuidas por moléculas como el psoraleno y el backuchiol, las cuales tienen propiedades cosméticas muy apreciadas y estudiadas.
El bakuchiol es una molécula natural que está presente en Psoralea Corylifolia y que tiene un efecto similar al del Retinol, por lo que se utiliza como alternativa natural y vegana en cosmética. Su efecto cosmético sobre la piel lo lleva a cabo al estimular la producción de colágeno lo que hace que la piel se fortalezca y preserve su integridad, reduciendo las líneas de expresión y las arrugas. También reduce los daños derivados de la radiación ultravioleta, como la hiperpigmentación. El Bakuchiol además, según algunos estudios, tiene efecto antibacteriano sobre bacterias tanto grampositivas como gramnegativas, por ello se dice que se puede usar para tratar el acné.
Otros componentes también tienen un efecto, por ejemplo, el psoraleno, que ayuda a volver a pigmentar la piel en el vitiligo y también ayuda a controlar la psoriasis y el eccema.
El aceite de babchi tiene como principales componentes químicos bakuchiol, psoraleno, linalol, limoneno, α-elemeno, angelicina, bavacalcona, isopsoraleno, corylifol, 6-prenilnaringenina, corilina, isobavacalcona, corylifolin, psoralidina, bavacribenzolavato de metil-4-hidrobaxivomanol.
Es antibacteriano, antioxidante, antifúngico, antitumoral, antidepresivo, estimulante, afrodisíaco, diaforético, antiviral, estomacal, astringente, antihiperglucémico, citotóxico, cardíaco, diurético, tónico, desobstruente, antihelmíntico y laxante.

Los aceites extraídos de las semillas de Babchi ayudan a tratar problemas de la piel como dermatitis, eczema, forúnculos, erupciones cutáneas, sarna, leucoderma, tiña y vitiligo. La investigación muestra que el aceite de Babchi tiene psoralenos que estimulan los pigmentos de melanina de la estructura de la piel y promueven la pigmentación. Mejora la salud de la piel y apuntala la pigmentación residual.

Aplicar la mezcla de 1 gota de aceite de lavanda, 2 gotas de aceite de Babchi, 1 gota de aceite de incienso, 2,5 ml de aceite de jojoba y 1 gota de aceite de naranja en las zonas afectadas de tiña, picor, erupciones cutáneas, sarna, vitiligo, edema afecciones de la piel, nódulos cutáneos inflamados, pápulas rojas, dermatosis decolorada y eczema. Favorece la circulación sanguínea; la producción de pigmentos de melanina purifica la sangre. También mejora el color de piel, cabello y uñas.