CÁPSULAS DE PLANTAS RICAS EN INTERFERONES
En ilumina no pretendemos confundir a las personas anunciando curas milagrosas, pero si las terapias naturales nos pueden ofrecer algun tipo de ayuda para elevar nuestras defensas naturales ante los virus, nuestra responsabilidad nos impulsa a presentarlas.
Está comprobado científicamente que los interferones ayudan a ralentizar el proceso de infección viral y de propagación de células tumorales.
¡QUÉ SON LOS INTERFERONES?
Los interferones obtienen su nombre por su capacidad de “interferir” con la replicación viral. Son un grupo de proteínas producidas por las células como respuesta a la presencia de diversos patógenos, tales como virus, bacterias, parásitos y células tumorales. Generalmente, una célula infectada por un virus secretará interferones, generando una activación en las defensas antivirales en las células cercanas.
Son glicoproteínas que pertenecen a la gran clase de proteínas conocidas como citocinas, moléculas empleadas para la comunicación entre células para desencadenar las defensas protectoras del sistema inmune.
Los interferones también tienen varias otras funciones: activan células del sistema inmune, como las células asesinas naturales y los macrófagos; incrementan las defensas del hospedador al regular el incremento en la presentación de antígeno a través del aumento en la expresión del complejo mayor de histocompatibilidad (MHC). Algunos de los síntomas de las infecciones, tales como la fiebre, dolor muscular y síntomas similares a los de la gripe también son causados por la producción de interferones y otras citocinas.
Se unen a receptores en la superficie de las células infectadas, activando diferentes vías de señalización en las que participan diversas proteínas antivirales (como la PKR), para impedir la replicación de una amplia variedad de virus de ARN y ADN. Cumplen, además, otras funciones: activan células inmunes, como los macrófagos y las células NK; incrementan el reconocimiento de células cancerígenas o infecciones, al dinamizar la presentación de antígenos a los linfocitos T y, finalmente, incrementan la capacidad de las células sanas para resistir a nuevas infecciones víricas.
El interferón fue descubierto por el virólogo suizo Jean Lindenmannace junto con Alick Isaacs en marzo de 1957, en un laboratorio en Inglaterra.
Los interferones se obtienen de plantas, tanto directamente como por proceso de síntesis. Algunas plantas son particularmente ricas en estas proteínas y podemos obtener un aporte adicional sin las ingerimos o tomamos en forma de infusión:
Taraxacum officinale.
Chamaemelum nobile
Echinacea angustifolia
Foeniculum vulgare
Camellia sinensis
PRESENTACIÓN:
90 cápsulas
POSOLOGÍA:
3 cápsulas al día durante 3 meses